La India es uno de los principales productores de café del mundo, estando entre los 10 países con mayor producción, y donde destaca uno de los cafés más fascinantes en cuanto a su origen: Monsoon Malabar, originario de la región de Malabar en el suroeste del país.

El café se almacena en bodegas abiertas a la acción de los vientos monzónicos, con el propósito de incrementar el cuerpo y reducir su acidez, resultando un café con notas muy aromáticas, y surgido por casualidad con una historia digna de ser contada...

Cuenta la leyenda que el resultado de este café fue elaborado por el azar. En su origen, el café viajaba con destino a los países escandinavos en los siglos XVII y XVIII en la bodega de barcos de vela junto a sacos de especias, el trayecto podía durar meses e incluso años. Durante aquellos largos viajes, el café  se enfrentaba a condiciones climáticas especiales, como aires húmedos y lluvias torrenciales, lo que hacía que durante el trayecto, el café se transformara cambiando por completo sus características organolépticas cuando llegaba a destino. Los exportadores encontraron, pese a temerse lo contrario, que este nuevo café, era apreciado y tenía buena acogida en los países de destino.El café adquirió su nombre debido a los vientos monzónicos, pues eran éstos los que favorecían la movilidad de los veleros de la zona y los que modificaban las características del café.

Hoy día, se siguen aprovechando los vientos monzónicos para alterar las características del café, pero en tierra firme, emulando los efectos que el mar y el sol producían en altamar. La temporada del “Monsoon” (viento Monzón) se da en la costa oeste del sur de la India y comienza a finales de mayo o junio, prolongandose varios meses.

Para la preparación del café sólo son utilizados granos de robusta, almacenados en depósitos especiales.  Los vientos húmedos del monzón circulan alrededor de los granos de café durante varias semanas, y debido a la humedad y el calor del ambiente, los granos sufren ciertos cambios biológicos; se hincha a casi el doble de su tamaño, cambia su textura,  y también su color(pasando del color verde característico a un color oro pálido) y sobre todo adquiere un sabor único, caracterizado por sus matices suavizados pero agresivos con sabor a humedad, resultando un café con escasa acidez.